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Pirograbadores
Un pirograbador es una herramienta utilizada para grabar en madera con calor, mediante el paso de una llama. Según el material que se quiera trabajar, se pueden elegir distintos pirograbadores: de gas, eléctricos o de cerillas.
Los pirograbadores de gas funcionan mediante una mezcla de aire y gas, que es encendida mediante una llama piloto. La llama se dirige hacia la punta de la herramienta, que se calienta hasta alcanzar una temperatura de 1.600 grados. Esta temperatura es suficiente para grabar en la madera, aunque también se pueden utilizar para trabajar metales, vidrio o piedra.
Los pirograbadores eléctricos funcionan a través de una corriente eléctrica, que se transforma en calor a través de un elemento resistivo. La temperatura de la punta llega a alcanzar los 1.200 grados, lo que permite grabar en la mayoría de los materiales.
Los pirograbadores de cerillas son los más sencillos de utilizar, ya que sólo requieren encender una cerilla y apuntarla hacia la superficie a grabar. La llama alcanza una temperatura de unos 1.000 grados, lo que es suficiente para trabajar la madera.
La utilización de un pirograbador requiere cierta habilidad y práctica, ya que es necesario tener en cuenta la dirección de la llama y la fuerza con la que se presiona sobre la herramienta. No obstante, una vez dominado el pirograbador, se pueden realizar diseños y textos con gran precisión.
Los pirograbadores se utilizan sobre todo en carpintería y ebanistería, aunque también se pueden utilizar para realizar adornos o reparaciones en muebles. Además, se están utilizando cada vez más en la fabricación de objetos de decoración, como llaveros, botellas o jarrones.
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